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Campeonato provincial absoluto 2022

Participación esperanzadora y triunfo de José Ponce

(Por Javier Cordero)

Ya ha pasado un año y la cita más importante del calendario provincial llegó generando una gran expectación alrededor, con una participación superior a la de los últimos años, casi doblando el número de ajedrecistas de las últimas ediciones. Entre todos ellos destacaban cuatro nombres propios: Martín Benítez, actual campeón provincial, los siempre competitivos Víctor Cólliga y José Ponce, y el cinco veces campeón provincial, Víctor Fernández Cano. Pudimos ver muchas caras nuevas y un buen número de jugadores en edad escolar, lo que siempre es una gran noticia.

NOTA: En esta crónica se incluyen distintas partidas. Al tratarse de un torneo de rápidas, éstas contienen diversos errores debido a los apuros de tiempo (hasta los GM los cometen en tales circunstancias). Sin embargo, me parece interesante incluirlas para saber qué ocurrió exactamente en el torneo, si se examinan sólo los resultados resulta imposible hacerse una idea clara de qué sucedió en realidad.

Primera Ronda

         El sistema suizo siempre da emparejamientos desiguales en la primera ronda, por lo que se suelen producir partidas poco emocionantes. En este caso los favoritos cumplieron sin muchos sobresaltos, mesa a mesa, sin que hubiese ningún resultado sorprendente. Eso sí, a Andrea López le tocó sufrir para imponerse a Urbano Elche en un final marcado por la igualdad y los apuros de tiempo. De hecho ambos fueron sobreviviendo gracias al incremento de tiempo de 5 segundos por jugada, terminando por imponerse la albaceteña tras una maniobra demasiado arriesgada de Urbano.

Andrea López Millán

         De las primeras mesas, Martín Benítez fue el que más dificultades se encontró ante la tenaz resistencia de Ernesto Calderón, aunque finalmente un pequeño desliz de Ernesto, cuando sólo le quedaban un puñado de segundos en su reloj (mientras su rival disponía de 9:12), permitió a Martín imponerse de forma clara. Veamos el desarrollo del final de ambas partidas:

Segunda Ronda

         En la segunda ronda suele llegar la animación a las primeras mesas... aunque no en este caso, ya que la mayoría de favoritos lograron imponerse con calma y tranquilidad. Ponce tuvo una partida plácida en la mesa 1, logrando un rápido triunfo. También muy cómoda fue la partida de Víctor Cólliga, que logró dos peones de ventaja ante Daniel Rodríguez, lanzando una masa de peones imponente contra el rey rival que avanzaban como un tercio de Flandes, lo que hizo que la partida acabase con rapidez por aplastamiento.

         Por su parte Víctor Fernández jugó casi toda la partida con calidad de más, relegando a su rival, Santiago Solís, a una actitud defensiva que tarde o temprano tenía que colapsar. Solís trató de cerrar la posición, pero al final las amenazas fueron demasiadas y tuvo que inclinar su rey.

Martín Benítez

         Martín Benítez logró una posición de gran ventaja ante Ignacio Crespo, pero lo hizo a costa de un gran gasto de tiempo, lo cual resultaría determinante (mientras Ignacio disponía de 9:41 en su reloj, Martín sólo tenía 3:05). La partida estaba absolutamente decantada del lado de Martín, pero a pesar de los evidentes apuros de tiempo a los que estaba sometido, el albaceteño se demoraba demasiado en cada movimiento que realizaba, por lo que, casi sin darse cuenta, su bandera cayó cediendo un punto que ya estaba subiendo a su casillero, lo que complicaba mucho su lucha por el primer puesto.

Tercera Ronda

         En la mesa 1 se dio una lucha de carácter posicional entre Félix Martínez y José Ponce, con mucha igualdad y un destino que parecía ser el empate. En estas posiciones hay que buscar algún tipo de desequilibrio para huir del empate, por lo que Ponce decidió prescindir de su pareja de alfiles para crear una debilidad en la estructura de peones blanca. El reloj estaba a favor de Ponce y Félix buscó una entrega de calidad que no funcionó, teniendo que inclinar su rey a las pocas jugadas.

         En la mesa 2, Víctor Cólliga logró un peón de ventaja y jugó de forma cómoda ante Javier Raboso, hasta el punto poder recolocar sus piezas mientras su rival tenía que hacer movimientos prácticamente de espera, logrando el triunfo de forma anticipada ante un desliz del taranconero. Javier juega con rapidez en todas sus partidas y no se suele apurar en cuanto al reloj se refiere, de hecho en esta partida fue Víctor el que tuvo que gestionar con cuidado su tiempo (faltando todavía 15 movimientos por realizar, disponía de 5:36 por los más de 13 min de su rival).

         Víctor Fernández también jugaba con peón de más ante Andrea López, con una posición mejor, a lo que había que sumar los apuros de tiempo de su rival (Andrea sólo tenía 1:46 en la parte final, mientras Víctor todavía disponía de 6:50). Al final la bandera de Andrea terminó cayendo, pero la posición ya estaba claramente decantada del lado de Víctor.

          En las mesas siguientes no hubo demasiados sobresaltos, los jugadores con elo tuvieron rivales asequibles y lograron victorias sin mucho que resaltar, lo que daría emparejamientos más duros en la siguiente ronda.

Cuarta Ronda

Óscar López Escribano

         Esta ronda resultaría decisiva en el devenir del torneo. En la primera mesa se planteó una dura lucha posicional entre dos de los grandes favoritos: José Ponce y Víctor Fernández. Estas posiciones suelen acabar en empate en partidas lentas, pero esto son partidas rápidas y la cosa cambia diametralmente: ambos jugadores se vieron asaltados por los apuros de tiempo y entraron en lo que serían los últimos 20 movimientos de la partida con menos de 2 minutos cada uno, para terminar realizando las últimas jugadas con sólo un puñado de segundos. Sin embargo, un detalle marcó la lucha: Ponce se hizo con la iniciativa y Víctor pasó a una posición pasiva, lo cual siempre es peligroso porque un error puede resultar fatal. A pesar de los apuros de tiempo, el juego transcurrió con bastante exactitud, lo que es digno de elogio, aunque finalmente Ponce logró hacerse con una ventaja clara... justo cuando la bandera de Víctor dijo que ya no podía aguantar más en pie.

         Todo hacía indicar que si se daba un triunfo de Víctor Cólliga, habría un duelo por todo lo alto entre él y José Ponce en la quinta ronda con el torneo en juego... pero Óscar López Escribano tenía algo que decir en todo esto. Y lo que ocurrió es que se dio una de esas partidas bonitas de ver, con muchas complicaciones tácticas, y ahí Óscar es un jugador sumamente peligroso. Tras la jugada c3 de las negras, que pueden ver en el visor, la partida cambió de forma drástica: Víctor consumió mucho tiempo buscando la mejor continuación y no se le veía nada cómodo, con gestos que denotaban que no estaba a gusto con la posición resultante. A partir de ese momento, la iniciativa fue de Óscar que apretó constantemente a su rival hasta llevarle a una posición perdida. Una bonita lucha que dejaba el torneo muy de cara para Pepe Ponce... lo que se acentuó todavía más con el triunfo de Urbano Elche sobre Martín Benítez, producido de forma bastante rápida, dejando al vigente campeón provincial sin ninguna opción de revalidar su título.

         Digno de mención fue el primer triunfo de Daniel Escamilla ante un rival con elo, en este caso José Luis Ayllón. Daniel no lleva mucho tiempo compitiendo y es un paso importante para él, y más de la forma en que lo consiguió: imponiéndose en un final con pocas piezas jugado con bastante exactitud, fase del juego complicada para los jugadores que aún están aprendiendo.

         En esta fase del torneo, la tabla estaba comandada por tres jugadores de Péon Avanzado:

Clasificación tras la 4ª ronda

1- José Ponce

4.0

2- Óscar López

3.5

3- Ignacio Crespo

3.5

4- Víctor Fernández

3.0

5- Víctor Cólliga

3.0

6- Andrea López

3.0

7- Javier Raboso

3.0

Quinta Ronda

        Centrado en lo que pasaba en la mesa 2, apenas pude observar el final de la partida del líder: José Ponce logró "colar" un peligroso peón en séptima, peligrosidad que Óscar López no valoró adecuadamente entrando en una variante en la que perdió con rapidez tras coronación del peón rebelde.

        En la mesa 2 estaba concentrada la tensión: enroques opuestos y avalancha de peones por parte de las blancas, conducidas por Víctor Cólliga, lo que le daba ya una considerable ventaja. Su rival, Ignacio Crespo, optó por una combinación muy arriesgada que le dejó completamente a merced del ataque blanco, sin poder hacer otra cosa que defenderse hasta que se vio obligado a sacar la bandera blanca y rendirse. Hay que mencionar que Víctor estuvo apurado de tiempo durante el final de la partida: 2:31 a 9:12, por lo que realizó los últimos movimientos con el reloj casi a cero.

        Mientras, Urbano Elche estaba jugando una buena partida ante Víctor Fernández, posición muy igualada e incierta. Sin embargo, Urbano vio como los minutos de su reloj decrecían peligrosamente, lo que le impidió poder jugar con comodidad, cosa que Víctor aprovechó para lanzar un par de golpes tácticos que le permitieron ganar dos peones y con ello el punto: así son las partidas rápidas.

Clasificación tras la 5ª ronda

1- José Ponce

5.0

2- Víctor Fernández

4.0

3- Víctor Cólliga

4.0

4- Andrea López

4.0

5- Óscar López

3.5

6- Ignacio Crespo

3.5

7- Javier Raboso

3.0

8- Félix Martínez

3.0

Sexta Ronda

         Quiso el programa de emparejamiento que el rival de José Ponce en esta última ronda no fuese Víctor Cólliga, que era lo esperado, sino Andrea López. Me inclino a pensar que el programa realizó este emparejamiento para cuadrar la uniformidad de partidas con blancas y negras de los implicados. Y dicha partida, en la que Ponce necesitaba unas simples tablas, se puso muy de cara para el líder cuando su rival se dejó la calidad y unas jugadas después una pieza. Rápido y cómodo triunfo que le daba un nuevo trofeo que añadir a su ya dilatado palmarés, con una actuación perfecta, seis de seis, mostrando un juego muy sólido y sobre todo, muy preciso en los apuros de tiempo. En resumidas cuentas, una victoria convincente y justa, sin peros, que deja al descubierto un talento para jugar al ajedrez que parece no tener fecha de caducidad.

José Ponce Navalón

         En la mesa dos ya sólo estaba en juego el subcampeonato, ya que la partida de Ponce se decantó con bastante rapidez. Víctor Cólliga y Víctor Fernández plantearon una partida posicional, de maniobras lentas, de búsqueda de pequeñas ventajas... hasta que a Cólliga se le escapó una pequeña combinación que le hizo perder un peón. Y desde ese momento, las blancas se hicieron con la iniciativa y con la partida tras un nuevo error de unas negras que ya iban a la deriva.

          Si en la edición anterior comenté que Ignacio Crespo había jugado su mejor torneo, una año después puedo repetir la misma frase: éste ha sido el mejor torneo que yo le recuerdo, logrando acabar en un meritorio tercer lugar que le sirvió para llevarse el trofeo de veteranos (aunque realmente el título como tal fue a parar a manos de José Ponce). Ignacio remató el torneo con una justa victoria ante José Luis Ayllón: logró un peón de ventaja, luego otro, para terminar imponiéndose en un final de peones y torres conducido con maestría. Muy buen torneo de los veteranos Félix Martínez y Urbano Elche, quinto y sexto clasificados: de forma tranquila, sin hacer mucho ruido, por parte de Félix, y con gran mérito por parte de Urbano, que estuvo siempre en las mesas altas, confirmando las buenas sensaciones que dejó en el provincial por equipos.

          La categoría femenina sólo contó con dos participantes, aunque realmente no hubo lucha ya que Beatriz García está comenzando en esto del ajedrez, mientras la campeona, Andrea López Millán, tiene un largo recorrido a sus espaldas, con algún título regional por edades en su haber. Andrea finalizó en un meritorio cuarto lugar, venciendo cuando tenía que hacerlo, aunque cuando se acercó a los puestos cabeceros fue frenada por los dos Víctor. Varias de sus partidas se decidieron en los apuros de tiempo, en los que se manejó con soltura, lo que le permitió sumar puntos importantes en posiciones que estaban igualadas.

          Entre los más jóvenes destacaron Jesús Tapia, primer sub 14, que mostró un juego muy competitivo incluso ante rivales duros, Daniel Escamilla y Avelino Bustamante, todos ellos con 3 puntos. No puedo dejar de mencionar la buena actuación de Jaime y Mateo Raboso: a Jaime se le escapó algún triunfo que ya estaba saboreando, pero en líneas generales compitió a gran nivel a pesar de estar entre "dinosaurios" (por la edad). Mateo podría haber salido por la puerta grande de haber rematado su última partida (y haber finalizado con 3 puntos de 6), en la que tenía clara ventaja en un final de 2 torres vs dama, en el que contaba con varios peones de más; ahí se notó su falta de experiencia, pero todo llegará... no olvidemos que sólo tienen 5 y 7 años respectivamente, el futuro es suyo.

Los taranconeros Jaime, Mateo y Edgar, e Íker Cano (Valera de abajo)

          Y así se echó el telón de un nuevo Provincial, totalmente distinto al anterior en el que tanta igualdad hubo, una competición marcada por los apuros de tiempo en muchas de las partidas, que marcaron el devenir de la clasificación, y que arrojó unos números realmente curiosos: de las 90 partidas disputadas, sólo una terminó en tablas (la que enfrentó a Óscar López e Ignacio Crespo). La ceremonia de entrega de premios fue bien dirigida, como siempre, por el árbitro Juan Manuel Fernández. El telón no sólo se echó en este campeonato, sino en la temporada oficial 2022 a nivel provincial. La siguiente parada es el torneo que organiza Caissajedrez en Tarancón: día 21 de mayo, torneo memorial Luis Gallardo y Rafael Matas, todos los ajedrecistas conquenses que puedan, deben apoyar esta iniciativa.

Juan Manuel Fernández, Víctor Fernández, F. Javier Poza, Jesús Tapia, Andrea López, José Ponce e Ignacio Crespo

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En la red desde el 04 de Julio de 2009